miércoles, 27 de enero de 2010

"Nobody's Business" de Alan Berliner (1996)

Enfrentarse a una de las dos figuras que determinan con tanto peso quienes somos y a donde va nuestra vida es difícil en la vida diaria. Y aunque es cierto que en el cine de alguna manera siempre se vierte una parte íntima del realizador, hacer un retrato en medium close up del padre (y por lo tanto del hijo mismo, un autoretrato) resulta avasallador. "Nobody's Business" transcurre a partir de la conversación que el realizador Alan Berliner tiene con su padre al hacer una retrospectiva de su vida y su familia. Ese diálogo en off sirve de conexión entre una serie de disertaciones hacia el pasado personal y universal, pero sobretodo sirve como monumento al padre, incluso a través de su cuestionamiento.

Destaca un montaje que escoge con precisión intercalar imágenes de archivo con material de filmes caseros, la entrevista con el papá e imágenes de panteones judíos descuidados o de campos de concentración abandonados. Así, él crea nuevos significados y plantea cuestiones a partir de las respuestas del padre. Berliner indaga en la cuestión de la familia y de las obligaciones morales que se tienen hacia con ella. Por un lado, el papá niega interés en saber de su propio padre y su abuelo, por falta de convivencia, ni se plantea la historia general del pueblo judío en el holocausto y como inmigrantes. Queda claro porqué para él su noción de familia es su familia próxima. Berliner lo expone a través de las home movies. Existe un pasado compartido que los une, cuestión que aleja a aquellos que su padre niega como familia. Berliner vulnera a su padre sin necesidad de abusar de su rostro. Cuando Berliner Sr. finge no escuchar la pregunta de su hijo "Why did you do all the 8mm home movies?" el realizador intercala vertiginosamente imagenes conmovedoras de las home movies con imágenes de su papá con su sordera conveniente. Podemos ver un sujeto humanizado sometido al examen de su propio hijo. Más allá de los errores que pudo haber cometido en el pasado, más allá de traumas y divorcios, el padre de Berliner sufre porque ama y su hijo se da cuenta de eso.


Por el otro lado, las imagenes de archivo de la llegada de inmigrantes europeos a Estados Unidos mientras Berliner Sr. habla de su padre, son usadas para desarrollar la tesis de Berliner que de alguna forma lo emparenta con todo el pueblo judío. También utiliza texto para desarrollar la idea de que si se recorrieran cincuenta generaciones en el pasado, se encontraría que todos los seres humanos son primos, familia.  Y así, como menciona uno de los reencontrados primos de Berliner "cuando me entere que eres mi familia, te trataré diferente, mejor." Berliner expone la cuestión de responsabilidad que tienen los individuos con la sociedad que es su familia también, idea antítesis de la noción de la familia que tiene el padre. 

"Nobody's Business" me parece un ejercicio de exposición personal interesante y valiente. Al ser honesta y carecer de pretensiones con situaciones sencillas e íntimas, Berliner toca fibras universales que acercan la relación de un padre y su hijo, que a pesar de todas las diferencias se aman y se complementan. Podemos ver en Berliner un poco de la necedad de su padre y en la confianza de sus ideas,  vemos que la opinión que su padre tiene de su trabajo le importa tanto como para meterla al final de la película. Como espectadores, es difícil no identificarse.

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